Así como Ford, GM y Hyundai, entre otras marcas, la compañía Volvo de origen sueco, propiedad del gigante chino Geely, se une al plan de otras automotrices, de apostarle a los autos eléctricos y abandonar los motores a gasolina.
Todas le apuestan a que en 2030 todos sus autos serán movilizados con motores eléctricos.
La automotriz Volvo apostará por el fin a los autos de motor de gasolina y toda su gama será completamente eléctrica hacia 2030, informó este martes la compañía de propiedad china.
Por su parte Hyundai lanzará 23 modelos de baterías en los siguientes cinco años. El primero de ellos es el Ioniq 5, un crossover de carga súper rápida que se presentó esta semana.
Hyundai se ha puesto una meta ambiciosa en materia de electrificación: lanzar 23 modelos a baterías en los siguientes cinco años para hacerse del 10% del mercado global de vehículos eléctricos. Este objetivo podría parecer inalcanzable si no fuera porque el fabricante surcoreano ha desarrollado una plataforma modular global eléctrica, denominada E-GMP, que le permitirá montar modelos de varios tamaños y formas, desde sedanes compactos, hasta crossovers y SUV.
El Ioniq 5 tendrá una autonomía de hasta 300 millas (unos 482 kilómetros) por carga, según el sistema de clasificación WLTP. Pero quizá lo más prometedor de esta nueva plataforma es que el tiempo de recarga de la batería será similar al de otros vehículos eléctricos más caros, incluido el Porsche Taycan y el nuevo Audi e-tron GT. Al igual que esos modelos, el Ioniq 5 ofrece un voltaje de 800 voltios, que es el doble de lo que ofrecen la mayoría de las plataformas actuales de vehículos eléctricos.